Reseña: Memorias de una Geisha de Arthur Golden

Titulo Original: Memories of a geisha

Autor/a: Arthur Golden

Editorial: Punto de lectura

Número de páginas: 672

Año de publicación: 1997

En esta maravillosa novela escuchamos las confesiones de Sayuri, una de las más hermosas geishas del Japón de entreguerras, donde aún resonaban los ecos feudales y donde las tradiciones ancestrales empezaban a convivir con los modos occidentales.
De la mano de Sayuri entraremos en un mundo secreto dominado por las pasiones y sostenido por las apariencias, en el que la sensualidad y la belleza no pueden separarse de la degradación y el sometimiento: un mundo en el que las jóvenes aspirantes a geishas son duramente enseñadas en el arte de la seducción, en el que su virginidad se vende el mejor postor y donde tienen que convencerse de que, para ellas, el amor no es más que un espejismo.

No contiene spoilers

Nunca en mi vida tuve un libro que fuese tan eternamente pendiente como Memorias de una geisha… me complace decir que leí este libro y me encantó, es un libro estupendo que te toca hasta la más minúscula fibra de tu cuerpo.

Memorias de una geisha nos relata la historia de Chiyo, una pequeña niña que desde pequeña vivió en un pueblito bastante maltratado por los años y luego es vendido por su anciano padre para que esta se vaya junta a su hermana Satsu a la ciudad de Gion; en donde ella con el pasar de los años se va a convertir en la geisha con más renombre de Japón.

En la vida nos topamos de vez en cuando con cosas que no entendemos porque nunca hemos visto nada semejante.

Este libro me fascinó y me maravilló por distintas razones. Tengo que decir qué, aunque me gustó mucho, el libro tiene varios pasajes donde la lectura se torna un poco pesada y hasta tiende aburrirte pero luego vuelve a retomar un ritmo ágil.

La verdad es que esta novela está escrita de una manera bastante pausada pero que te permite digerir todo lo que vas leyendo, todo lo que tiene que ver con la vida de Chiyo, la cultura, la manera tan distinta en la que ves a las mujeres japonesas, etc. Sin embargo, el ritmo no va a ser impedimento para que te deleites con la maravillosa historia de Chiyo.

Siempre me llamó la atención lo que era todo esto del mundo de una Geisha, de hecho, un amigo una vez que el significado de la palabra Geisha era puta… sin embargo, cuando leí esta novela me di cuenta de que él estaba totalmente equivocado y que la mayoría de las personas que piensan eso lo estaban –a mi parecer- debido a que ahora entendí que Geisha significa ser una artista y saber dominarte a ti misma.

Todo lo que aprendí de la cultura Japonesa es gracias a este libro, de hecho, también aprendes bastante historia con el haha. Quiero decir que, aunque los comienzos de Chiyo como Geisha fueron impulsados por el amor, siento que es muy poco el romance que vemos en la novela y más bien, es un amor seco que a mi aunque si me movía la fibrilla, quería golpear al Presidente y a Sayuri.

Aquel hombre me estaba mirando como un músico podría mirar a su instrumento justo antes de ponerse a tocar, con conocimiento y maestría. Sentí que podía ver dentro de mí, como si yo fuera parte de él.

Los personajes de esta novela son variopintos, encontramos personajes de todos los colores aunque encontré un factor común en todos: la melancolía.

Chiyo es un personaje que me encantó y se convirtió en una de mis personajes femeninas favoritas, por la fuerza interior que ella demanda y como nunca se dejó vencer ese a las adversidades. Su evolución es notable, como se transforma a lo largo de los años de una niña  a una mujer de renombre por sus propios méritos.

Otro personaje que me gustó pero a menor escala fue Mameha, la instructora de Sayuri, aunque es una mujer que se hace sentir siempre sentí que se movía por puro interés entonces nunca llegué realmente a compenetrar con ella.

Pasando a hablar de los personajes masculinos el que más resalta es el presiente, aunque no se desvele mucho de él, siento que compenetré mucho con él, sobre todo en la parte final del libro.

En conclusión, Memorias de una Geisha es un libro fantástico que no se pueden perder. Es profundo, hermosa y tiene unas situaciones y frases que te hacen ver la vida de otra manera. 100% recomendado. Si algo tiene de mal este libro es sin duda la lentitud con la que se dan algunas cosas, de resto, todo genial.

Pero ahora sé que nuestro mundo no es nunca más permanente que una ola que se eleva sobre el océano. Cualesquiera que sean nuestras luchas t nuestras victorias, comoquiera que las padezcamos, enseguida desaparecen en la corriente, como la tinta acuosa sobre el papel.

 

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